Translate

domingo, 10 de noviembre de 2013

MI REGALO PERFECTO

Relato aportado por Rogueitor


Llevaba ya cuatro meses saliendo con Ana una escultural morena de metro setenta de altura y unos setenta kilos. Un día llega a mi casa y encuentra el ordenador encendido con una pagina Web en la pantalla cuyo nombre es el foro lucha erótica, me pregunta si me gusta y con la voz entrecortada la digo que si.

- Bueno nadie es perfecto - me responde con una sonrisa picarona.
 
Pasan meses de confesarle ese secreto y ella me mira con una luz en sus ojos que no puedo descifrar, y mientras tanto se acerca el día de san Valentín. Yo ya la tengo su regalo comprado pero ella me ha prometido que tendré una "sorpresa especial", expectante a esa sorpresa intento averiguar de que se trata pero ella no suelta nada. Llego el día y por la tarde la entrego su regalo que es un vestido que le gustaba el cual con complicidad de una amiga suya había comprado, ella me dirigió hacia mi regalo aun intrigado por lo que era. Llegamos a un chalet alejado de la ciudad y entramos, tras eso me dijo que me pusiera cómodo, lo hice aunque el salón parecía un poco espartano. A los cinco minutos llega una pelirroja de cabellos un poco más largos que los de Ana y se presento como Ángela, al rato se escucha un "Ángela ¿vienes?" y me quede más intrigado aun si se podía.

Tras un tiempo sin saber si espiar a las chicas o no escucho como Ana y Ángela me llaman diciendo que baje. Llego a lo que parecía por la ubicación el garaje aunque estaba aislado, tenia en todo el suelo colchonetas y un diván cerca de una de las paredes, cuando termino de bajar empieza a sonar música de película romana y aparecen Ana y Ángela ambas vestidas con minúsculas túnicas blancas atadas con una cuerda las cuales dejan ver sus torneadas piernas y sus pies descalzos. Me llevan al diván y tras sentarme me sirven un poco de bebida.

- Ahora que estas cómodo empieza el espectáculo - dicen a la vez mirándome -. "Ave Caesar, morituri te salutant".

Con ese saludo ambas dirigen su mirada la una hacia la otra y empiezan a girar con las manos en garras, tras la segunda vuelta competa se dirigen la una hacia la otra cogiéndose de las manos. Ahí me doy cuenta que ambas son casi de la misma altura y peso además de ser casi parecidas lo que en algunos casos suele ser señal de una pelea difícil para ambas participantes, durante la prueba de fuerza Ana pierde un poco de terreno, el cual tras una mirada lo recupera y hace retroceder a su contrincante; tras unos segundos de tira afloja se separan y ambas dicen:

- Aquí se termina el teatro y empieza lo bueno.

Vuelven a cargar pero esta vez las manos no se dirigen hacia las manos de la rival si no a su cabellos los cuales estaban sueltos y ondeando al aire, tras alcanzarse las manos se llenan de cabellos rojos en los de Ana y negros en los de Ángela y se ponen a llevar la cabeza de la rival de un lado a otro intentando además de hacer daño conseguir que se caiga al suelo. Tras unos minutos así Ángela deja una mano en la cabeza de mi novia y la dirige hacia el hombro que tiene la sujeción de la túnica, Ana al ver el movimiento acepta el desafió soltando ella también una mano buscando la túnica de la rival. Durante el intenso forcejeo las dos manos buscan destrozar la ropa de la rival, primero se rompe la de Ángela y segundos después la de Ana, mostrando en ambos cuerpos una figura bien contorneada y pechos firmes. La piel de ambas amazonas empezaba a brillar aunque tal vez por la tez mas oscura de mi novia se notase mas en ella aunque yo no estuviese totalmente seguro, instantes después de soltar los trozos que ambas se habían llevado de la prenda de su antagonista se lanzaron hacia adelante chocando sus hermosos pechos y sujetándose la una a la otra en un abrazo en el cual se mezclaba le tez mas clara de la pelirroja con la oscura de la morena formando una especie de jing jang que intentaba devorar el uno al otro.

En un momento ambas caen y empiezan a rodar por el suelo, tirándose de los pelos por detrás y sujetando un pecho de su enemiga para tenerla bien sujeta, siguieron rodando durante minutos sin que ninguna de las dos se quedase encima de la otra más que unos segundos. En uno de esos momentos en que la amazona se coloco arriba se sentó en los hombros de la que era mi favorita aunque la que estaba dominando tampoco era un cardo y parecía una digna rival de quien había preparado mi regalo especial. La dominante guerrera empezó a dirigir su trasero hacia la cara de la subyugada pero en un momento de despiste Ana logro zafarse de la humillante sentada que quería practicarle su rival aunque con el lance perdió lo que le quedaba de túnica. Ambas se levantaron, mi novia se quito la cuerda que antes sujetaba la pequeña prenda.

- Animo Ana – digo en ese momento.
- Tranquilo tigre que esa tigresa decorada la arena de combate – responde Ángela.

Empiezan a dar vueltas otra vez tras ese breve descanso y el fuego de los azules ojos de mi novia arden con más intensidad y buscan los ojos verdes de su rival, tras el momento en que fijan sus miradas la pelirroja se lanza a por la morena la cual aprovecha para usar su velocidad y derribarla dejándola sin lo que llevaba unos minutos siendo una minifalda.

- Creo que la leona ha perdido algo – contesta Ana al anterior comentario de su adversaria.

En este momento me doy cuenta de lo especial que me esta haciendo sentir Ana, no solo me prepara una pelea si no que lo da todo para ganarla delante mía, mientras divago ambas volvieron a caer al suelo en un sudoroso combate pecho contra pecho sexo contra sexo en el que están muy igualadas y ninguna quiere ceder terreno, pero durante un momento pierden el paralelismo que llevaban y veo como Ana sujetando una pierna empieza a presionar sus muslos contra la cabeza de Ángela la cual logra liberarla y busca un enfrentamiento entre iguales atenazando con los miembros inferiores la cabeza de su rival. Ambas están quietas en el suelo con las manos luchando por conseguir un hueco por el cual pueda entrar el aire durante minutos pero tras ese enfrentamiento Ana suelta la llave y se rinde.


Es una decepción relativa para mí, aunque perdiese vi que dio todo en esa pelea, eso me enorgullecía y como había visto que fue una dura pelea felicite a ambas. Tras ducharse y vestirse tomamos un refrigerio en el chalet, durante la cena Ángela me contó que era una antigua amiga del colegio de Ana que habían coincidido durante el verano antes de conocernos en la playa observando una pelea, como a ambas eran aficionadas en este mundo decidieron que cuando surgiese un buen motivo tendrían una pelea deportiva. Aunque me sentí un poco utilizado las perdone porque me gusto el enfrentamiento aunque claro hice que prometiesen que en el verano Ana tuviese el combate de revancha.

No hay comentarios:

Publicar un comentario